“La fibra dietética es aquel componente de la dieta que no es hidrolizado por el tracto digestivo humano y que se relaciona con una alimentación saludable por los beneficios que su consumo provoca.”
Un estudio realizado por FAO en 26 países europeos sobre ingestión de fibra dietética concluyó que la fibra aportada por cereales y hortalizas tiene un mayor efecto protector en enfermedades cardiometabólicas y ciertos tipos de cáncer, que la aportada por frutas y raíces amilaceas.
El último informe elaborado por el American Institute for Cancer Research acerca de la alimentación y su relación con la prevención del riesgo de padecer cáncer define que “gran parte de la investigación de laboratorio relacionando alimentos y cáncer sugiere que el consumo habitual de granos integrales, legumbres, hortalizas y frutas tendría relación con la prevención de desarrollo de tumores. El consumo de los mismos debe ser diario y la cantidad sugerida para obtener el efecto protector de alrededor de 2/3 del plato”. 5
El meta-análisis realizado por Jia-Yi Dong y col sobre base de datos PubMed en 10 estudios publicados hasta enero de 2011, demostró que las mujeres que comían mayor cantidad de fibra tenían 11% menos de probabilidad de enfermar de cáncer de mama. Demostraron que hay evidencia significativa de dosis respuesta inversa relacionada con el consumo de fibra y el riesgo de enfermar.
En Inglaterra, Escocia y Gales se realizó un estudio de cohorte sobre 35792 mujeres pre y post menopáusicas entre los años 1995 a 1998, publicado en 2007 por Oxford University Press. En el mismo se demostró en mujeres pre menopáusica una relación inversa entre el consumo de fibra y riesgo de padecer cáncer de mama estadísticamente significativa. La fibra de los cereales se asoció inversamente también con el riesgo de cáncer de mama. Mientras que la fibra aportada por las frutas tuvo una relación límite.
Una hipótesis acerca del por qué de esta acción sería que la fibra inhibiría el mecanismo de reabsorción de los estrógenos, de la sintetasa de estrógenos humanos y la reducción de los niveles de andrógenos que influyen en los niveles de estrógenos y la proliferación del tejido del seno.
Por lo tanto, concluimos que una alimentación que responda a las premisas de la Gráfica de la Alimentación Saludable, es uno de los pilares en la prevención de enfermedades crónicas.
Bibliografía:
1) MSC Zuleta;A “Hacia una nueva definición de fibra: aciertos y controversias” XVIII Congreso SAN Agosto 2011
2) Kendall; CW; Emam; A; Augustin; LS Jenkins; DJ “Resistant starches and health” JAOAC Int 2004
3) Jia-Yi;D; Ka,H; Peiyu; W “The consumption of dietary fiber and breast cáncer risk: a meta-analysis of prospective cohort studies”. Am J Clin Nutr agosto 2011
4) Cade; J, Burley; V, Greenwood,; D “Dietary fiber and risk of brest cáncer in a cohort study of women in UK” Oxford Univerrsity Press 2007
5) http://www.aicr.org/foods-that-fight-cancer/